Hay una serie de tareas que deberías realizar en casa antes de subir al avión. Ya sean 2 horas o 20 las de vuelo, tendrás que matar el tiempo de alguna manera.
Si te gusta leer y, además, tienes una tablet puedes descargarte en ella libros que consideres interesantes y que quieras leer.
Una vez que el avión haya despegado, los pasajeros son libres de utilizar sus dispositivos móviles, eso sí, sin conexión a Internet, así que puedes aprovechar para leer un poco. Si no eres muy fan de las nuevas tecnologías, también puedes llevarte un libro de casa o un libro de crucigramas para matar el tiempo.
Por otra parte, en los aviones la parte del cuerpo que más sufre son los oídos. Un consejo para que esto no ocurra es mascar chicle, así evitarás que se te taponen los oídos cada dos por tres.
No se recomienda leer durante el despegue ni el aterrizaje, pues son dos de los peores momentos de subir en avión. Así evitarás marearte.
Ir variando de actividades ayuda a que el tiempo pase más deprisa, sobre todo si llevas ya una hora sentado en el avión y comienzas a desesperarte. Puedes leer, ver una película, escuchar música o hacer crucigramas, por ejemplo.
En verano y en invierno se nota bastante el aire acondicionado en los aviones, esto provoca que al viajero se le reseque mucho la garganta y propicia que pueda ponerse de mal humor. Intenta hidratarte y beber mucho líquido para evitar esta sequedad y no olvides llevar a mano una chaqueta por si acaso.